Se cumplió apenas una semana de que los Warriors de Golden State volvieron a la cima de la NBA , tras vencer en seis partidos a los Celtics de Boston, para ganar su cuarto final en los últimos 10 años. Bien dice un dicho que “lo importante no es llegar, sino mantenerse” y eso lo sabe mejor que nadie el Gerente General, Bob Myers.
Dentro de los círculos basquetboleros, hay la percepción y sensación de que este núcleo campeón, con base en jugadores clave como Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green y Andrew Wiggins, apenas comienza su dominio en el mejor basquetbol del planeta. Ese debería ser un pensamiento aterrador para las otras 29 franquicias, pero para que eso ocurra, los Warriors deben hacer su chamba desde las oficinas del equipo, para traer, por lo menos, a la mayoría del elenco que consiguió la gloria hace unos días.
El festejo de los Warriors en San Francisco tras el título de la NBA
Golden State tiene siete agentes libres sin restricciones: Kevon Looney, Otto Porter Jr., Nemanja Bjelica, Andre Iguodala, Damion Lee, Gary Payton II y el mexicano Juan Toscano-Anderson. Los restringidos son Chris Chiozza y Quinndary Weatherspoon.
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¿Quienes tienen más chances de continuar en el equipo campeón de la NBA?
Los que más posibilidades tienen de regresar son Looney, Porter y Payton, al ser jugadores clave en el sistema y en las rotaciones de Steve Kerr, posiblemente Iguodala sería atractivo, al ser un veterano que conoce bien el equipo, pero todo dependerá de que no decida retirarse. Incluso, el entrenador ha dicho que lo recibirían con los brazos abiertos.
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La cuestión en contra para la franquicia de la bahía de San Francisco es que están $24.6 millones por encima del impuesto, y aquí es donde debe entrar la creatividad de la gerencia general, así como la disposición de ciertos basquetbolistas de dejar de lado temas económicos en pos de triunfos deportivos. Con este panorama, los Warriors lucen como el rival a vencer la próxima temporada y en los próximos años.
