Diego Armando Maradona tuvo un paso por el futbol mexicano cuando de forma sorpresiva en septiembre de 2018 arribó a Dorados de Sinaloa, tomó al club en la última posición del Apertura 2018 y lo convirtió en un equipo ganador, su gran deuda fue no poder lograr el ascenso del equipo.
Maradona digirió a Dorados de Sinaloa.
La afición se encargó de responder ante la llegada de Diego, así lo estableció José Antonio Núñez, presidente de la entidad pues indicó que la platea baja, la más cercana a la zona técnica se fue vendida en su totalidad durante el Apertura 2018.
Cuando llegaste a Sinaloa ya eras una leyenda.
— Dorados (@Dorados) November 25, 2020
Gracias por regalarnos tu mejor versión, por todo el amor que nos diste y por enseñarnos a disfrutar el fútbol como sólo tú pudiste hacerlo, esperamos haberte regresado un poco de lo mucho que nos diste.
Te amaremos siempre, Jefe. pic.twitter.com/DrdrzHgYy8
Con la llegada de buenos resultados el club sinaloense se empapó de lo que significaba el ‘Pelusa’ y sus dirigidos se llevaron el ritmo del Diego, con bailes en los vestuarios a pesar de sus dolencias en las rodillas, lo que hacía más emblemáticas sus charlas para el cuadro del Gran Pez.
El Diego regresó a uno de los escenarios que lo llevó a lo más alto como lo fue el Estadio Olímpico Universitario, donde disputó la fase de grupos de la Copa del Mundo de México 1986, de forma que se transformó en un regreso a donde mostró su magia que coronaría con la obtención del ansiado trofeo.
Al final fueron dos finales consecutivas a las que logró llegar con Dorados, pero ambas las perdió ante San Luis, con esto el argentino entró a los libros de historia del futbol mexicano, pues se trató de los primeros clubes en disputar dos finales de liga consecutivas.
Maradona disputó 20 duelos de temporada regular con Dorados; obtuvo la victoria en 11 ocasiones, perdió 3 y empató seis. Por su parte en liguilla, tuvo un 12 duelos, con balance de 7 victorias, tres derrotas y dos empates.