La discriminación en el futbol femenil sigue latente

No solamente algunos jugadores masculinos siguen discriminando con hechos o palabras a las futbolistas femeninas que en muchos sentidos han mostrado que pueden igualar e incluso mejorar su desempeño en una cancha de futbol.

Janelly Farías, jugadora del América femenil, es una fiel embajadora del deporte y de las que más promueven la equidad y respeto hacia las mujeres. Como futbolista que no solo busca brillar en este ámbito sino ser parte de la Selección Mexicana, Farías lucha contra la homofobia ya que personalmente fue rechazada por su familia por su orientación sexual, lo que casi la obligó a dejar el futbol.

Después de haber recibido comentarios de un usuario en redes que se refirió a ella como: “Eres la Megan Rapinoe mexicana, solo pinta tu cabello. Los liberales me enferman” y de ver las declaraciones de Carlos Salcedo tras ser expulsado de Tigres donde utilizó palabras como “Juego de Barbies, en el futbol existe contacto”, Janelly Farías expresó su descontento.

Al usuario de Twitter le respondió inteligentemente considerando su mal intencionado comentario: “Cuando alguien intenta ofenderte, pero lo percibes como el mayor de los cumplidos” y cambió su nombre de usuario a “Megan Rapinoe Mexicana”.

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En cuanto a Carlos Salcedo, la jugadora expresó que sus palabras utilizan la feminidad como un intento por menospreciar el deporte, ya que utilizan la misma para burlarse e insultarse entre hombres y que es parte del problema con el que tienen que lidiar las mujeres a diario.

Después de estas palabras, el campeonato femenino se unió con el hashtag #JuegoComoBarbie, con fotos donde se muestra que también en el futbol femenil hay contacto.

Janelly está dispuesta a seguir defendiendo y luchando por la igualdad de género, salarial y libertad de elegir ser, quien cada ser humano desee sentir o ser.