Aunque la Selección Mexicana es el máximo ganador de la Copa Oro también ha tenido fracasos muy sonados que hacen recordar que no se deben confiar a pesar de ser considerado por muchos como el “gigante de la Concacaf”.
Gol de Orbelín Pineda en el México vs Jamaica en el Estadio Azteca
Desde que este certamen se renovó con cambio de nombre en 1991, la Selección Azteca ha disputado 16 torneos en los que en seis de ellos ni siquiera llegó a la final por el título que te ostenta como el mejor equipo de la zona.
La vez más reciente fue en la Copa Oro 2017 cuando los dirigidos por Luis Pompilio, en suplencia de Juan Carlos Osorio por suspensión, batallaron desde la fase de grupos, posteriormente apenas pudieron con Honduras en cuartos de final y el desastre vino con la eliminación ante Jamaica en semifinales.
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En la edición del 2013 se vivió otro certamen desastroso bajo la tutela de José Manuel “Chepo” de la Torre con Salvador Reyes en el banquillo; en donde pagaron caro llevar a una selección alterna y apenas pasaron como segundos de grupo, hasta que finalmente en semifinales perdieron contra Panamá.
Selección Mexicana fracasa en Copa Oro 2005
En la Copa Oro 2005 fue todavía peor para los pupilos de Ricardo La Volpe, quien llamó a muchos jugadores sin tanta experiencia, lo que se reflejó en una fase de grupos muy turbulenta y posteriormente la sorpresiva eliminación en cuartos de final ante su similar de Colombia.
Un caso similar sufrió la Selección Mexicana en la edición 2002 cuando el técnico Javier Aguirre decidió llamar a muchos jóvenes que pecaron de novatos al quedar fuera de manera prematura en los cuartos de final ante un equipo de Corea del Sur que llegó como invitado al evento.
El primer gran fracaso de la Selección Azteca en la era moderna de la Copa Oro se dio en el 2000 cuando Manolo Lapuente también convocó a muchos futbolistas sin tanta experiencia y en cuartos de final los eliminó Canadá.
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Finalmente, en la edición de 1991 también los mexicanos se llevaron una dolorosa derrota cuando los dirigidos por Lapuente cayeron ante los Estados Unidos en las semifinales; esto provocó la renuncia del estratega en pleno torneo y ya ni siquiera disputó el partido por el tercer lugar.
