La pregunta después de ver las Finales de las Conferencias y que conozcamos a los rivales para la edición 56 del Super Bowl en el SoFi Stadium es: ¿quién parte como favorito, Bengals o Rams?
La respuesta está lejos de ser sencilla de resolver aunque con cierta ventaja parten los L.A. Rams. La razones son debido a que jugarán en su estadio y que el talento tanto ofensivo como defensivo de la organización de Los Ángeles es mucho más llamativa para los aficionados.
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El equipo de Sean McVay llega al Super Bowl por segunda ocasión en cinco años y es una racha favorable para el entrenador en jefe que fue contratado en el 2017. En la final de conferencia vimos un escenario adverso para los Rams y salieron avantes.
Así que la etiqueta de favoritos la tienen los Rams, por que el quarterback Matthew Stafford ha conseguido conectar con sus diferentes armas ofensivas, como OBJ Jr. Cooper Kupp, Van Jefferson; pero lo más llamativo que tiene este equipo es su defensa Aaron Donald, Leonard Floyd, Von Miller, Jalen Ramsey y Eric Weedle. La combinación perfecta entre experiencia, juventud y jugadores que han jugado un Super Bowl; por eso parten como favoritos.
Cabe destacar que la apuesta de la organización al inicio de la pretemporada de cambiar a Jared Goff y traer a Matthew Stafford al equipo angelino rindió frutos, recordando que la última visita al Súper bowl de los angelitos mucho quedó en lo que no pudo hacer el quarterback.
Los de Cincinnati nunca han ganado un Super Bowl en la historia además de que será la primera ocasión que Zac Taylor como entrenador en jefe llegue a ese partido (ya había estado en uno previamente como entrenador de quarterback en la edición 53), esto no quiere decir que lleguen como las víctimas; solamente que no parten con la presión y eso en un partido de esta índole puede jugar a su favor.
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