Alejarse de los asientos de la Fórmula 1 ha significado que el australiano Daniel Ricciardo se “desintoxique” de las frustraciones que vivió en las últimas campañas. El piloto perdió su asiento en McLaren a manos de Oscar Piastri luego de dos años de complicaciones y trabas que le impidieron tener un desempeño óptimo en la escudería.
Las circunstancias fueron complicadas de aceptar, pero Ricciardo hoy reconoce que le ha venido bien el hecho de salir de la parrilla para convertirse en piloto de pruebas de Red Bull, en donde ya fue titular hace algunas campañas.
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“Mi primer día en el simulador con Red Bull este año fue probablemente la sesión de simulador más divertida que he tenido”, dijo Ricciardo a Speedcafe. “No había estado en una cabina en casi tres meses, así que todo era nuevo y emocionante y, francamente, estoy de regreso en un lugar donde tengo muy buenos recuerdos”, añadió.
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Daniel Ricciardo la pasa bien fuera de la parrilla de la Fórmula 1
El Honey Badger, como le apodan, detalló que se ha divertido mucho haciendo los tests con el equipo de la bebida energética. “La sesión estuvo a cargo de Simon (Rennie), quien una vez fue mi ingeniero, y nos reímos todo el tiempo. Tuvimos un gran día”.
Incluso detalló que no quería dejar de correr en el simulador. “Pero en esta sesión alguien dijo ‘si has hecho suficientes vueltas, podemos terminar’ y yo dije ‘no, unas vueltas más’ y luego seguí pidiendo una vuelta más, así que bromeamos diciendo que no era fácil sacarme del volante”, comentó entre risas.
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El piloto de 33 años, que trabaja para volver a la parrilla principal en 2024, concluyó que necesitaba de este break para apreciar de nuevo su estadía en la máxima categoría automovilística.
“Era un poco raro porque a medida que crecía solo quería correr y no me importaban mucho las pruebas y otras cosas. Así que disfrutar el simulador de esta manera significaba que era bueno que extrañara el deporte por un tiempo”.