Christian Horner, jefe de Red Bull Racing, ha sido claro: Daniel Ricciardo nunca alcanzó el nivel necesario para reemplazar a Sergio “Checo” Pérez. Aunque las actuaciones del mexicano dejaron algunas dudas en la temporada, Ricciardo no consiguió mostrar el rendimiento necesario para convertirse en una opción automática.
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Las expectativas no cumplidas de Ricciardo
Horner explicó que, aunque hubo momentos en los que Ricciardo parecía despertar, especialmente después de algunos incidentes como su encuentro con Jacques Villeneuve en Montreal, el australiano no fue lo suficientemente constante. “Le dije que llamara a Jacques antes de cada carrera”, comentó en tono jocoso, refiriéndose al impacto positivo que ese encuentro tuvo en el rendimiento de Ricciardo ese fin de semana.
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Sin embargo, el problema fundamental fue la falta de consistencia de ambos pilotos en diferentes momentos de la temporada. Mientras Checo comenzó la campaña con gran fuerza, Ricciardo tuvo flaquezas y dificultades para seguirle el ritmo. Y cuando Pérez empezó a luchar contra su auto, el australiano apenas comenzaba a recuperar un poco de forma, pero nunca lo suficiente para justificar un cambio radical.
Horner dejó claro que el regreso de Ricciardo a Red Bull no era un hecho, y que la decisión de poner a Liam Lawson en el coche busca evaluar otras opciones. “Necesitamos respuestas para el futuro de los pilotos”, concluyó Horner, dejando en el aire lo que podría suceder con Pérez a largo plazo.
Con seis carreras restantes en la temporada, Red Bull tiene tiempo para evaluar y decidir sobre el futuro de sus pilotos. Aunque Pérez tiene contrato para 2025, sabe que debe cerrar la campaña con fuerza para apagar todo tipo de rumores a su alrededor.
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