El pacto que mantendrá a Checo Pérez en Red Bull (por lo menos) hasta 2026

Como en todo deporte, la Fórmula 1, más allá de ser una competencia en donde están los mejores del mundo en la especialidad, es también un negocio en donde hay muchos factores a tomar en cuenta a la hora de tomar ciertas decisiones.

No estoy diciendo que los pilotos estén donde están por mera conveniencia comercial. No es así. Los filtros para ingresar a la Fórmula 1 son sumamente estrechos, y para lograrlo claramente hay que tener un nivel deportivo superlativo.

Checo Pérez lo tiene, pues no es casualidad haber conseguido un subcampeonato mundial. Con todo y los altibajos que sufrió a bordo del RB19 en 2023, el piloto tapatío logró levantarse para firmar su mejor temporada, y darle la vuelta a la página para concentrarse ahora en su futuro en la categoría y la próxima campaña.

En los últimos días, surgió la versión de que el mexicano no sólo cumplirá su contrato vigente en 2024 con la estructura de la bebida energética, sino que incluso lo extendería. Una fuente cercana al piloto confirmó a Azteca Deportes que Pérez alargará su acuerdo. “Seguro (que va a firmar), pero vamos a esperar a que se dé la información oficial”, dijo.

No sabemos por cuántos años sería este nuevo acuerdo. Lo que sí sabemos es que hay mucho interés en mantener al tapatío en Red Bull por lo menos hasta 2026, y quizá más allá de esa fecha, que es cuando la empresa estadounidense Ford comenzará a fabricar las unidades de potencia del equipo de Fórmula 1.

El piloto de 33 años ha participado de manera estrecha con Ford en varios de sus anuncios oficiales. En septiembre de este año, participó en la presentación oficial de un nuevo auto de lujo eléctrico, e incluso, Azteca Deportes pudo saber que el mexicano ha estado grabando más contenido con la marca en los días recientes.

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La idea de esta fábrica de autos es no sólo mantener esta relación sino fortalecerla de cara al 2026, que es cuando comienza el acuerdo con Red Bull en la F1, pues la multinacional con sede en Dearborn, Michigan, entiende la importancia de que cuando comience a fungir como proveedora del equipo de Milton Keynes, por lo menos uno de los pilotos debe ser de nacionalidad estadounidense o mexicana, pues Ford tiene a su principal mercado en Norteamérica.

Por si fuera poco, en 2022 Ford registró pérdidas cercanas a los 2 mil millones de dólares, y aunque enderezó el barco en el primer trimestre del 2023 de acuerdo con información de El Economista, elevando su expectativa para este cierre de año, para la empresa es vital continuar fortaleciendo su principal fuente de ingresos, que es México y Estados Unidos. Checo Pérez es la figura ideal para hacer realidad estos planes.

No es la primera vez que un proveedor de motores tiene voz en los asientos de los pilotos. Sin irnos más atrás, el japonés Yuki Tsunoda se ha visto beneficiado en su ascenso a la Fórmula 1 debido a que la empresa de su misma nacionalidad, Honda, actualmente fabrica la unidad de potencia de Red Bull y Alpha Tauri.

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Incluso, recientemente se dio a conocer que Honda ahora pasaría a proveer a Aston Martin, al grado que Tsunoda tuvo que salir a declarar que espera que eso no le cause malos entendidos con su equipo.

“Estoy centrado en rendir para Red Bull, no para Aston Martin. Ojalá no malinterpreten nada”, declaró.