Otro podio en su circuito predilecto y Checo Pérez ha vuelto a marcar un parteaguas en la disciplina que practica. Con el segundo lugar que se adjudicó en el Gran Premio de Azerbaiyán, ya son 20 ocasiones en las que el mexicano ha terminado una carrera entre los tres primeros, una marca que se perfila para crecer próximamente.
El ascenso en sus números lo ha llevado a tener una puntuación que, después de ocho carreras, se entiende histórica para el automovilismo de nuestro país. Son 129 unidades que colocan al tapatío en la segunda posición del mundial de pilotos, sólo por detrás de su coequipero y vigente monarca de la Fórmula Uno, Max Verstappen, quien presume 150 y anhela consagrarse bicampeón del serial.
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Si se toma en cuenta que existen 21 puntos de diferencia entre el neerlandés y el mexicano, la idea de ver a Sergio en lo más alto ha dejado de ser utópica. Cada carrera otorga 25 al ganador y puntúan los primeros diez, por lo que hay una serie de combinaciones que, en las semanas entrantes, pueden invertir las posiciones y cristalizar el hito que aproximaría a Pérez a conseguir lo único que –ha admitido- le falta: ser campeón del mundo.
Up to P2 in the Drivers' Championship 🏆 @SChecoPerez 👏 #AzerbaijanGP 🇦🇿 pic.twitter.com/YTmCLoXn56
— Oracle Red Bull Racing (@redbullracing) June 12, 2022
Por primera vez desde su irrupción en el Gran Circo, Checo aspira a liderar el campeonato y el público, como nunca antes, lo impulsa desde su trinchera. En redes sociales, abundan las muestras de admiración, mensajes de aliento, felicitaciones y hasta exigencia para el volante azteca más competitivo de todos los tiempos.
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Se trata de un icónico embajador del deporte mexicano. Su destreza en el monoplaza, puestos sin precedentes para un compatriota, actos de bondad, innegociable resiliencia y la sonrisa que siempre lo acompaña son algunos de los elementos que hacen del deportista de 32 años un triunfador innato.