Han pasado tres carreras y lo que parecía una mala tarde aquél domingo de Mónaco, se ha convertido en una circunstancia que prevalece para el piloto mexicano Checo Pérez. Al tapatío le ha costado una eternidad retomar su mejor nivel, ese que al inicio del campeonato lo colocó en las conversaciones para un posible campeonato mundial.
Hoy ese tema ya ni siquiera está en puerta, pues las últimas carreras han alejado a Max Verstappen, sólido en esa primera posición, con una ventaja que cuando aún el campeonato es joven, parece irreversible.
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Errores propios, fallas en la estrategia, y hasta la mala suerte, le ha jugado en contra al nacido en Guadalajara, Jalisco. Checo se encuentra en un punto álgido de la conversación, pues el asiento de Red Bull es uno de los más calientes en la categoría reina.
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Por si fuera poco, la Fórmula 1 lo ha sacado este miércoles de su power ranking por primera vez en la temporada. A pesar de que remontó seis posiciones en Canadá, su desempeño en la clasificación del sábado y el hecho de no estar en el podio por tercera carrera consecutiva, obligó a la organización a omitirlo de su top 10 tradicional publicado después de cada competencia.
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Alex Albon, en la cima del power ranking
La gran sorpresa fue Alex Albon de Williams, quien en algún momento ya también corrió el Red Bull que hoy presume Pérez. Inevitablemente esto ha levantado polvo y la única manera de apaciguarlo es con una sólida actuación de Pérez en la próxima carrera en Austria, la casa de la estructura de la bebida energética, y en donde tanto él como Max están obligados a dominar con autoridad.