El Gobierno británico ha anunciado una serie de disposiciones en contra del equipo Chelsea, por los vínculos del dueño del equipo Roman Abramovich, con el presidente ruso Vladimir Putin, que mantiene los ataques sobre Ucrania por más de dos semanas.
Ante los actos bélicos, y que desencadenaría en problemas para los blues, Abramovich le puso signo de precios al cuadro de la Premier, y una fecha límite del 15 de marzo para recibir ofertas de magnates o empresas que buscaran hacerse del equipo.
Parecía que Abramovich estaba precipitándose con el plazo, pero estimaba que podría ser sancionado por el gobierno, lo que pegaría en todos los niveles y estructura del equipo, pasando por la parte financiera y deportiva.
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¿Cómo sancionó el Gobierno Británico al Chelsea?
Con estas sanciones, el gobierno no permitirá al Chelsea llenar su estadio, el Stamford Bridge, no podrá hacer transferencias ni en venta ni en compra, ni podrá renovar a futbolistas de la escuadra como Antonio Rüdiger.
El cuadro inglés, también está congelado y no podrá completar la venta del club a uno de los diez magnates que lo acechaban, aunque podría recurrir a un permiso especial para poder seguir con ese proceso y deslindarse lo más pronto.
¿Qué implican las sanciones contra el Chelsea?
Con las sanciones, el Chelsea no podrá obtener beneficios de ninguna transacción que haga, por ejemplo, las tiendas que venden artículos del equipo, han quedado cerradas.
En el tema de la venta, Abramovich no recibirá ningún beneficio por la venta del equipo, aunque el magnate ruso que se hizo del equipo en 2003, ya avisó que el dinero que recibiera, lo destinaría a ayudar al pueblo ucraniano.
Por ahora, se le ha adjudicado al Chelsea una “licencia especial” para que pueda seguir operando en el día a día. De este modo podrá pagar los salarios a todos sus empleados, incluyendo jugadores y entrenadores.
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Otro golpe a las finanzas del Chelsea, impacta en su estadio: donde no podrán vender entradas para partidos a partir de este 10 de marzo.
En el aspecto deportivo hay mucha confusión, más allá de que los salarios están asegurados, pues el dinero que entra por concepto de transmisión se destinará a esta necesidad, no podrán renovar, fichar ni vender.
Cuando el equipo sea vendido, se espera que el gobierno pueda tomar una nueva acción para anular las sanciones, aunque para ello aún faltarían semanas o meses.
