Melbourne, Australia. Después de 44 años, una tenista australiana se vuelve a coronar en el Abierto de Australia. Ashleigh Barty, sembrada número uno, derrotó a la estadounidense Danielle Collins (27) por 6-3 y 7-6.
¿Podremos ver algún día a Federer en Acapulco? Zurutuza responde
Barty pone punto final a una maldición local que privó a las ‘aussies’ de alcanzar el título en los últimos 44 años.
Fue precisamente Chris O’Neill, la última ganadora australiana, la que portó el trofeo Daphne Akhurst hasta la pista central Rod Laver Arena y la leyenda local Evonne Goolagong la elegida para entregar la copa a Barty, que cerró el choque en una hora y 27 minutos.
Te puede interesar: Casi se retira, Rafa Nadal no sabía si volvería a jugar
Collins, que llegó a la cita como una de las tenistas más agresivas, con 164 golpes ganadores, tardó en encontrar el ritmo, del mismo modo que Barty, que tuvo que salvar una pelota de rotura cuando el marcador lucía un 2-2.
Sin embargo, en el juego siguiente, la tenista de Queensland dio un paso al frente al resto para apuntarse el primer ‘break’ y colocar una ventaja que acabaría significando el 6-3 definitivo.
Ashleigh Barty cerró la primera manga con cinco saques ganadores y acumuló un 94% de puntos con primeros, tras 32 minutos.
La tenista de Florida, sin embargo, no se dejó intimidar por un imponente estadio que rugió en su contra, hasta el punto de hacerle celebrar varios puntos contra un sector del público que la abucheó, y Barty encajó una doble rotura en el mismo partido por primera vez en el torneo, que significó un rotundo 1-5 a favor de Collins.
Ashleigh Barty gana su tercer Grand Slam en su carrera
La número uno mundial se reencontró con su característico revés cortado, que trastocó la considerable ventaja de Collins, así como con un acertado servicio, que le catapultó a remontar la cuesta e ir al juego de desempate definitivo.
Te puede interesar: Estrellas de AAA se encontrarán en la “triple” Triplemanía
El público, más numeroso como consecuencia de una ampliación al 65% de la capacidad total, animó más que nunca para contar con una campeona australiana 44 años después.
Barty, que cerró el partido con diez saques directos y 30 golpes ganadores, se llevó el ‘tie-break’ por un imponente 7-2 tras convertir una preciosa pasante de derecha.
Con la victoria, se sumó a la estadounidense Serena Williams como la única jugadora en activo en haber ganado una competición ‘slam’ en tierra, hierba y pista dura.
Fue su tercer ‘slam’ después de sus títulos de Roland Garros en 2019 y Wimbledon en 2021. Al llegar a la final, aseguró el número uno tras la conclusión de la competición y será su 113ª semana reinando la lista WTA.
Con información de EFE