El árbitro de la Premier League , Michael Oliver, ha sido objeto de amenazas de muerte y abusos tras el partido entre Wolverhampton Wanderers y Arsenal celebrado el pasado sábado. Oliver, quien expulsó al jugador del Arsenal, Myles Lewis-Skelly, por una entrada sobre Matt Doherty, recibió numerosos insultos y amenazas a través de redes sociales y mensajes directos después del encuentro.
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El partido, que terminó con la victoria del Arsenal por 1-0, se jugó en el Molineux Stadium y estuvo cargado de tensión. La decisión de Oliver de mostrar la tarjeta roja directa a Lewis-Skelly fue confirmada por el árbitro asistente de video, lo que obligó al Arsenal a jugar la segunda mitad con un hombre menos. A pesar de esta desventaja, el equipo dirigido por Mikel Arteta logró llevarse los tres puntos.
El Colegio de Árbitros de la Premier League (PGMOL) emitió un comunicado condenando los ataques hacia Oliver y su familia, calificándolos de “aborrecibles” e “inaceptables”. “Ningún funcionario debería ser objeto de ningún tipo de abuso, y mucho menos de los abominables ataques dirigidos contra Michael y su familia durante las últimas 24 horas”, dijo el PGMOL. La policía ya ha iniciado investigaciones para identificar a los responsables de las amenazas.
Mikel Arteta se expresa sobre la decisión arbitral
Arteta, entrenador del Arsenal, expresó su descontento con la decisión de Oliver, afirmando que la falta cometida no ameritaba una sanción tan severa. “Es tan obvio que no necesitaba ni palabras”, comentó Arteta, insinuando que el club podría apelar la decisión.
Esta situación ha generado un debate sobre el abuso y las amenazas que los árbitros enfrentan en el futbol profesional. El PGMOL reafirmó su apoyo a Oliver y a todos los afectados, y manifestó su determinación para acabar con este comportamiento inaceptable2. “Estamos apoyando a Michael y a todos los afectados y estamos decididos a abordar este comportamiento inaceptable”, añadió el organismo.
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El caso de Michael Oliver resalta la necesidad de proteger a los árbitros y garantizar su seguridad, ya que su labor es fundamental para el correcto desarrollo del juego. Las amenazas y abusos no solo afectan a los árbitros, sino también a sus familias, y es crucial que se tomen medidas para erradicar este tipo de conducta en el futbol.
